¿Alguna vez consideraste decorar tu hogar con una planta carnívora? Pues si hasta ahora no lo habías pensado, prueba con muestras gratis y descubre cómo cambian los espacios con una naturaleza más exótica y atrevida.
Si estás buscando cambiar la decoración de tu hogar, pues una planta carnívora será una gran elección. Como bien sabes, las plantas y la naturaleza en general, aportan frescura y bienestar a los espacios, de allí la importancia de incorporarlas dentro del hogar, en especial en los ambientes cerrados.
Es por este motivo que, a lo largo de todo el artículo, te contaremos lo que necesitas saber sobre una planta carnívora. Existen diferentes tipos y especies, pero solo te enseñaremos aquellas que son ideales para tener dentro de la decoración de tu hogar.
También, te daremos una serie de consejos a la hora de los cuidados que debe tener. Si bien no es muy difícil, hay algunos factores que son fundamentales para mantener la buena salud de tu planta carnívora.
Por último, si decides sembrar tú mismo tu propia planta, pues con un paso a paso te guiaremos sobre cómo germinar las semillas plantas carnívoras. ¿Ya ves? Un post cargadísimo de información. Vamos a por ello.
Tipos de plantas carnívoras
Al momento de ambientar el hogar, uno tiende a optar por elementos clásicos y que no pasan de moda. Colores neutros, que combinen entre sí, pero sin mucho juego. En cuanto a la vegetación, siempre en la misma y, en ocasiones, puede llegar a aburrir.
Es por ello que si te has decidido por tener una planta carnívora en tu hogar, debes tener en cuenta que no todas se adaptan a los interiores, por lo que aquí te contaremos cuáles son los tipos de plantas carnívoras que debes tener en cuenta.
Planta carnívora : Dionaea muscipula
Esta es la planta carnívora más conocida y la más adquirida en las tiendas. Se trata de una Venus atrapamoscas, y consta de una boca que se abre y se cierra en cuanto detecta que su presta se ha posado en ella. Al intentar escapar, este movimiento desprende jugos digestivos y así se alimenta.
Planta carnívora : Drosera rotundifolia
En este caso, es más parecida a una flor que a una planta en sí, por ello es que también se la conoce como “rocío del sol común”. Se caracteriza por tener hojas pegajosas que se encuentran adheridas al suelo y segregan un fluido dulce para capturar insectos, los cuales pegan pegados a sus hojas y la planta cierra sus tentáculos.
Planta carnívora gigante: Nepenthes alata
Pues bien, si dispones de espacio y prefieres una planta carnívora gigante y llamativa, no dudes en adquirir esta. Si se encuentran en estado salvaje, el tamaño que pueden alcanzar es muy grande, en tanto que si la tienes en maceta, será más moderado. Ahora bien, se caracteriza por tener una forma de “jarra” en la cual quedan atrapados los insectos.
Flor planta carnívora: Pinguicula grandiflora
Si buscas algo más exótico y diferente, esta será tu aliada. Se destaca por sus flores violetas que reciben el nombre de “violeta de agua”. Posee hojas extensas y anchas, pero lo que la diferencia de los tipos anteriores, es que no cuenta con una trampa, sino que se alimenta de los insectos que quedan pegados en sus hojas.
Planta carnívora : Sarracenia purpurea
Por último, este tipo de planta es lo más parecido a un pulpo, debido a sus grandes tentáculos. Estos van ganando grosor y tamaño a medida que crecen en altura. Dentro de esas trompas, poseen pelos pegajosos en los que se adhieren los insectos y, gracias al líquido digestivo, mueren y la planta carnívora se alimenta.
Cuidados de una planta carnívora
Pues bien, si bien existen diferentes tipos de plantas carnívoras, con características y especificaciones variadas, los cuidados son similares para todas y, además, muy fáciles, ya que no requieren de ningún producto especial y suelen aclimatarse muy bien al sitio donde las coloques.
Sustrato
En cuanto al sustrato, ten presente que estas plantas no son muy exigentes, ya que crecen en casi cualquier suelo, pero lo ideal es que sea rico en minerales para favorecer su crecimiento. Puedes optar por turba sin abonar combinada con otro material que facilite el drenaje. Por ello es que su cuidado es tan simple como un lavado de ropa con wipp express.
Riego
En el caso del riego, debes tener en cuenta que a las plantas carnívoras les gusta el riego por inmersión, por lo que lo ideal es que sumerjas la macera entera en un recipiente hondo con agua. Recuerda que debe drenar para que no se estanque.
Durante la primavera y el verano, el riego debe ser frecuente, sobre todo si la tienes dentro de casa. Si está en el exterior, debes contar la lluvia como parte del riego para no excederte. En los meses de invierno y otoño, debes reducir la frecuencia a unas 3 veces por semana.
Luz
Pues bien, ligado al factor anterior, es importante saber que a estas plantas les gusta mucho la luz natural, pero no tanto el calor. De esta manera, si te encuentras en una zona muy calurosa, intenta que el sol no le dé de forma directa, pues podrías dañarla. En cambio si vives en un sitio templado, no hay ningún problema con la exposición.
Alimento
Claro que se alimentan de insectos o arácnidos, moscas, mosquitos, hormigas, mariposas pequeñas, abejas, entre otros. Bien te explicamos cómo funciona su alimentación cuando atrapan a sus presas, pero cuando están en el interior, debes alimentarlas tú. Solo basta con que le consigas uno o dos insectos a la semana.
Ubicación
Por último, la ubicación. Este es otro aspecto que debes tener en cuenta al momento de los cuidados de una planta carnívora, ya que precisan de mucha luz, ya sea directa o indirecta.
Otro dato a considerar, es que muchos de los insectos polinizadores se encuentran en peligro de extinción, por lo que si colocas tu planta en el exterior, pueden comerse esos agentes que tan necesarios son.
Puedes colocarla junto a tu planta de Navidad dentro de tu casa y disfrutar de la armonía de una decoración natural.
Cómo germinar las semillas de una planta carnívora
Para cerrar con el artículo de hoy, queremos contarte en simples pasos, cómo germinar las semillas de una planta carnívora para que puedas tener una en casa.
Ahora que ya conoces cuáles son los tipos “domésticos” y qué cuidados necesitan, recordarás que les gusta la luz, por lo que la época de siempre va desde mediados de la primavera hasta el verano.
Lo primero es conseguir el sustrato que no contenga ni fertilizante ni abono, ya que sus aditivos no permitirán cultivar una planta carnívora. Puedes escoger la turba con perlita o arena y comenzar con la germinación.
Primer paso
A tu envase germinador, hazle orificios en la base y en la tapa para que sirvan de ventilación para evitar la formación de hongos. De esta manera, lograrás concentrar la temperatura y humedad, generando el microclima adecuado.
Segundo paso
Al sustrato que tienes, debes colocarle un poco de agua destilada o desmineralizada, y mezclar hasta obtener una pasta húmeda pero con consistencia. Luego lo llevas al recipiente germinador, cubriendo bien los orificios para que las semillas no vayan a caer por allí. Coloca 4 cm de sustrato en el envase y 1 a 4 cm cuando termine el sustrato y la tapa. De esta manera tus semillas germinarán correctamente.
Tercer paso
Cuando ya realizaste los pasos anteriores, es momento de colocar las semillas sobre el sustrato, no las entierres, ya que lo harán por si mismas cuando germinen. Como ya te adelantamos que necesitan riego por inmersión, lo que debes hacer es colocar este envase sobre una bandeja con agua.
Cuarto paso
En el último paso, vas a rociar con fungicida para prevenir cualquier tipo de plaga. Lo debes realizar cada 7 días y lo ideal es situar el cultivo al lado de una ventana iluminada, pero no al sol directo.
Pues bien, ya sabes todo acerca de las plantas carnívoras para el hogar. Ahora solo basta con que te decidas a tener una en casa. Ya ves que su germinación y sus cuidados son bastantes sencillos.
Un dato no menor, es que estas plantas no van a hacerte daño, solo se alimentan de insectos a los cuales reconocen, por lo que si las tocas o le colocas una pequeña piedra, no van a cerrar sus hojas.