Si estás pensando en disfrutar de unas vacaciones en familia, algo que no puedes olvidar es el flotador de tu bebé. Sí, fundamental para tu tranquilidad y la de todos. Si no tienes uno, no te preocupes, consigue muestras gratis de flotadores y disfruta de tus días libres.
Sin duda, no hay nada que preocupe más a los adultos que un bebé en una piscina. Es cierto que nadar es una de las actividades más beneficiosas para ellos, ya que les ayuda a desarrollar sus habilidades motrices al mismo tiempo que los divierte y los familiariza con el agua desde pequeños.
Como estos aspectos son muy importantes para tu pequeño, tienes que asegurarlo con un buen flotador, para que así pueda disfrutar del agua y tú de la tranquilidad de verlo nadar.
Sin embargo, si bien existen muchos tipos de flotadores y todos son realmente seguros, es necesaria la compañía y el cuidado de un adulto mientras esté en el agua.
Es por eso que si estás en búsqueda del mejor flotador para tu bebé, este es el post ideal para ti. Vamos a contarte los tipos de flotadores que existen en el mercado y algunas consideraciones que debes tener en cuenta antes de comprar uno.
Flotadores para bebé en el mercado
No existe nada más bonito que disfrutar de unas merecidas vacaciones. Ir a la playa, disfrutar del sol, nadar en la piscina. Sin duda, unos planes que gustan a los más grandes y a los más pequeños.
Pero igual que se utiliza crema para proteger del sol, es necesario un flotador para que los más pequeños puedan zambullirse en el agua.
Lo cierto es que un flotador de buena calidad ofrece comodidad, diversión y seguridad para los bebés, ya que pueden funcionar como anti vuelco evitando que el pequeño se dé la vuelta y sufra algún accidente.
Te enseñamos algunos de los flotadores más comunes que puedes conseguir en el mercado.
Flotador redondo o anillo
Estos flotadores van situados alrededor de cuerpo del niño con una braguita que facilita su uso para bebés a partir de los 8 meses de edad.
También puede ser utilizado para el baño en edades muy tempranas, siempre y cuando un adulto esté con él y mantenga ciertas precauciones, como por ejemplo, sostener su cabecita.
Chalecos
Los chalecos son una opción muy elegida por su flotabilidad y su seguridad, pero se están recomendados para niños a partir de los 4 años, siempre y cuando tengan una base de natación.
La ventaja de su uso es que los mantiene calientes y protegidos de la radiación del sol. Después de un día de piscina, quedarán listos para que les leas cuentos infantiles para dormir y descansen felices.
Manguitos
Se trata de un flotador que se ha extendido en el tiempo y sigue siendo tan popular como años atrás. Son elementos de contrastada seguridad que dotan de cierta autonomía en el agua y es improbable que se pierdan en ella.
Son recomendados a partir de los 12 meses, siempre bajo la supervisión de un adulto. Mientras él nada, tú puedes acompañarlo buceando con tu máscara de esnórquel y así estarás seguro de su cuidado.
La burbuja
Este flotador es uno de los más recomendados para aprender a nadar, ya que su objetivo es facilitar la flotabilidad en el agua en la posición más parecida a natación o estilo rana. Gracias a sus cinturones, se les puede añadir individualmente elementos auxiliares a gusto del peque.
Son recomendados y adecuados para niños a partir de los 3 años de edad y que ya estén familiarizados con el agua.
Consideraciones para comprar un flotador para bebé
Ahora que ya conoces los tipos de flotadores que existen en el mercado y sus características, es hora de que tengas en cuenta algunas consideraciones a la hora de la compra.
Si quieres que sea de buena calidad, seguro, cómodo y divertido, tienes que asegurarte de que cumpla con ciertos aspectos que garanticen su seguridad y confianza.
Edad y peso
La edad y el peso del niño tienen su razón de ser a la hora de elegir un flotador. Cada modelo está diseñado para soportar cierto peso máximo, si queda grande o pequeño, no estará adaptado a su cuerpo y puede exponerlo a accidentes.
Tiendas especializadas
Si bien es cierto que hoy en día puedes encontrar flotadores en cualquier tienda, si quieres estar seguro y tranquilo de que será el mejor, sobre todo en consideraciones básicas como que no se desinfle o pinche fácilmente, tienes que comprarlo en una tienda especializada en productos de natación.
Marca de calidad y durabilidad
Una vez que estés en la tienda de natación, tienes que asegurarte de que la marca sea de calidad y el material durable. Lo ideal es una marca de prestigio y conocida, que cuente con el sello de calidad de UE y que el material sea vinilo o PVC, ya que son los más resistentes y seguros.
Con o sin sombrilla
Este aspecto es sumamente personal, pero necesario. Hay algunos modelos de flotadores que tienen una sombrilla y cumplen la función de proteger a tu niño del sol y de los rayos UV.
Es importante que sepas que además de este techo, tienes que ponerle bloqueador en su piel, para que tenga una protección extra.
Precio
Una vez que ya has tenido en cuenta todos estos aspectos, llega el momento de pagar. Aquí necesitas un equilibrio entre calidad y precio.
Recuerda que es probable que tu niño lo use una temporada porque crecen tan rápido que seguramente tendrás que cambiarlo. Busca un equilibrio económico pero que cumpla con estos requisitos.
Ahora que ya conoces los tipos de flotadores que existen y las consideraciones que debes tener en cuenta a la hora de elegir el mejor para tu bebé, podrás disfrutar de unos días en la playa o en la piscina, con la tranquilidad de que tu pequeño estará protegido y divertido.
Así que ya sabes, si tienes un bebito de 8 meses en adelante, comprarle un flotador para que aprenda a nadar y relacionarse con el agua, es una de las mejores inversiones que podrás hacer.