Pocos días faltan para las fiestas y a último minuto queremos salir a hacer compras de los regalos navideños, o los ingredientes que nos faltan para nuestro gran banquete. Es por esta razón que hoy vamos a hablar un poco sobre el turrón blando, el dulce más requerido en las navidades.

Una de las ventajas de los turrones es que no precisan de muchos ingredientes ni de horno, por lo que es una golosina muy fácil y rápida de hacer y que a todos gusta. Si no tenemos ingredientes en casa, podemos conseguir muestras gratis y disfrutar de un exquisito turrón navideño.

El turrón blando, como bien decíamos, es uno de los favoritos para las navidades. Su intenso sabor a almendras es uno de los aspectos que lo caracteriza y lo lleva a ser el más elegido en estas fechas.

En este post queremos explicar cuáles son los beneficios y las propiedades de los turrones artesanos, ya que, si bien son una golosina, sus ingredientes son naturales y provechosos para el organismo. También contaremos las diferencias entre el turrón a la piedra y el blando, porque a veces puede tenderse a confusión.

Por último, estaremos presentando dos exquisitas recetas con turrón que no podemos dejar de preparar en estas fiestas: el turrón de Alicante y una tarta de turrón blando. Imposible no tentarse.

Beneficios de los turrones artesanos

Al momento de incorporar alimentos en nuestra alimentación, siempre debemos tener en cuenta que tengan propiedades beneficiosas para nuestro organismo. En especial cuando se acerca fin de año y en las fiestas no solemos medir lo que consumimos.

En el caso de los turrones artesanos, al no ser procesados ni industrializados, pueden aportarnos muchos beneficios para la salud de nuestro organismo.

Los turrones de almendra son un claro ejemplo de esto, ya que este fruto seco es rico en proteínas, hidratos de carbono y en vitaminas A, B1, B2, C, D, E Y PP. Entre sus propiedades, también se destaca por su contenido en fósforo, hierro, calcio, potasio y magnesio.

Gracias a sus propiedades antioxidantes y al calcio, este dulce nos puede ayudar con nuestra estabilidad cardiovascular y a mejorar los síntomas de aquellas enfermedades que afectan a las articulaciones y al fortalecimiento de los huesos.

Como tiene bajo contenido en azúcares, es una golosina apta para personas con diabetes, pero no debemos olvidar que tiene un alto contenido calórico, por lo que hay que ser moderados al momento de consumirlo.

Diferencia entre el turrón a la piedra y el turrón blando

Diferencia entre el turrón a la piedra y el turrón blando

Como en todo tipo de dulces y golosinas, en los turrones también existen diferentes variedades con diversas características que los vuelven únicos. Sin embargo, en ocasiones pueden resultar similares, en especial por su apariencia, pero que difieren mucho uno del otro.

Un claro ejemplo de ello es el turrón a la piedra y el turrón blando o de Jijona, que si bien se parecen por su color y suelen confundirse, tienen algunas diferencias importantes.

Ingredientes

En el caso del turrón a la piedra, además de almendras tostadas contiene ralladura de limón, canela y azúcar. En tanto que el turrón blando no está elaborado ni con limón ni con canela, sino que con clara de huevo y miel.

Este turrón tiene un alto contenido calórico, ya que por cada 100 gr, aporta unas 556 calorías aproximadamente, por lo que si buscamos un alimento más liviano, debemos consumir fruta, ya que, por ejemplo, las calorías de una manzana, por cada 100 gr, proporcionan 99 kcal.

Consistencia

En cuanto a la consistencia, ambos turrones son diferentes, ya que el turrón a la piedra tiene una textura parecida a la de los polvorones. Sin embargo, los turrones blandos tienen una consistencia más aceitosa y maciza.

Elaboración

En primer lugar, muchas personas suelen confundir al turrón a la piedra con el turrón duro, claro, por su nomenclatura, pero la realidad es que es todo lo contrario, ya que su nombre proviene de su proceso de elaboración, realizado en un molino de piedra, en frío.

En cambio, el proceso de elaboración del turrón blando es en caliente, en los boixets, estas máquinas en forma de mortero.

Recetas con turrón duro y turrón blando

Recetas con turrón duro y turrón blando

Para finalizar queremos presentar dos exquisitas recetas ideales para preparar en Navidad o en año nuevo.

Una de ellas es más sencilla, ya que es la clásica receta del turrón de Alicante, mientras que la otra es un poquito más elaborada, aunque sin horno, por lo que es sencilla de realizar.

Turrón de Alicante

Ingredientes

Preparación

El primer paso para comenzar con este turrón es calentar la miel, a fuego lento, en un cazo. Debe quedar líquida. A ella le agregamos el azúcar y mezclamos para integrar bien ambos ingredientes. Una vez que conseguimos una textura similar a la del caramelo, la reservamos.

Batimos la clara de huevo hasta que quede montada y espesa, y la añadimos a la mezcla de miel y azúcar. Ahora es el turno de las almendras.

Como están crudas, vamos a tostarlas en el horno o en una sartén por unos minutos. (Podemos dejarlas enteras o partirlas a la mitad). Las mezclamos con la preparación anterior.

Forramos un molde con papel para hornear y colocamos una de las láminas de obleas en el fondo. Extendemos por encima toda la mezcla que preparamos anteriormente y por ultimo agregamos la lámina de oblea restante. Dejamos reposar en la nevera.

Una vez frío y compacto, lo recortamos con mucho cuidado. Para otra versión, si nos apetece, podemos agregarle chocolate y convertir este turrón duro en un delicioso y original turrón de chocolate.

Tarta de turrón blando

Ingredientes

  • 1 paquete de galletas
  • 300 gr o 1 tableta de turrón blando
  • 400 ml de nata para montar
  • 100 g mantequilla
  • 50 ml de agua
  • 250 ml de leche
  • 100 g azúcar glass
  • 6 láminas de gelatina neutra
  • Almendras para decorar

Preparación

Lo primero que debemos hacer es triturar muy bien las galletas y mezclarlas con la mantequilla derretida para conseguir una mezcla homogénea. La colocamos en el molde donde vamos a preparar la tarta, la apartamos y la llevamos a la nevera unos minutos.

El segundo paso es disponer las láminas de gelatina en agua fría durante 10 minutos para que se hinchen. Por mientras, agregamos la leche, junto con el turrón picado, en un recipiente que llevaremos a fuego medio.

La idea es mezclar por 5 minutos sin parar para que evitar que se pegue. Apartamos del fuego y batimos con batidora para lograr una mezcla homogénea.

Deshacemos las láminas de gelatina en 50 ml de agua caliente y se las agregamos a la preparación anterior. Removemos bien para integrar todo. A continuación montamos la nata con el azúcar glass, hasta conseguir una textura cremosa y con mucho volumen.

Es momento de integrar ambas preparaciones. Para no perder el volumen ni la textura de la nata montada, debemos incorporarla con movimientos envolventes y suaves. Retiramos las galletas procesadas con manteca de la nevera y, por encima, vertemos toda la mezcla con cuidado.

La dejamos descansar por 20 minutos a temperatura ambiente y luego la llevamos a la nevera por 7 horas. Pasado ese tiempo decoramos con las almendras. Lista para servir.

Ahora que ya conocemos las propiedades beneficiosas que tienen los turrones de almendras, y aprendimos a realizar dos riquísimas recetas con ellos, nos toca a nosotros prepararlas y sorprender en nuestra mesa navideña.