Si alguna vez has sentido un dolor intenso que te impide moverte y alguno de tus músculos está duro como una piedra y te duele con solo tocarlo, es probable que hayas sufrido una contractura muscular.
Las contracturas musculares son una de las molestias más frecuentes que afectan a nuestro cuerpo. Pero, por suerte, existen formas de aliviarlas y prevenir su aparición. En este artículo te vamos a dar algunos consejos prácticos y efectivos para cuidar tu salud muscular y evitar el dolor. Además, te vamos a mostrar cómo puedes conseguir muestras gratis de muchos productos, donde también encontrarás algunos que pueden ayudarte a relajar tus músculos y a recuperarte mejor.
¿Qué es una contractura muscular?
Las contracturas musculares se producen cuando un músculo se contrae de forma involuntaria y permanece así durante un tiempo prolongado. Esto hace que el músculo se acorte y se endurezca, provocando rigidez, inflamación y dolor, que puede ser localizado o irradiarse a otras zonas del cuerpo, como la espalda, el cuello o la cabeza. Esto suele deberse a que el músculo no recibe suficiente oxígeno y se acumula ácido láctico o el sobreesfuerzo produce una inflamación en el tejido.
Las contracturas musculares pueden tener diferentes causas, pero en general se deben a un desequilibrio entre la actividad y el descanso del músculo. Algunas de las causas más comunes son el estrés, el sedentarismo, el ejercicio intenso, las malas posturas o las lesiones.
¿Qué causa las contracturas musculares?
Las contracturas musculares pueden tener diferentes orígenes, pero en general se deben a un desequilibrio entre la actividad y el descanso del músculo. Algunas de las causas más habituales son:
- El estrés: el estrés emocional o mental puede provocar que los músculos se tensen y se contraigan de forma involuntaria, especialmente los del cuello y la espalda. El estrés también puede afectar al sueño y a la respiración, lo que dificulta la relajación muscular y provoca contracturas.
- El sedentarismo: la falta de actividad física puede debilitar los músculos y hacerlos más propensos a sufrir contracturas. Además, pasar mucho tiempo sentado o en una misma postura puede provocar que los músculos se acorten y se sobrecarguen.
- El ejercicio intenso: el ejercicio físico es beneficioso para la salud muscular, pero si se hace de forma excesiva o incorrecta puede causar lesiones o inflamación en los músculos. Es importante calentar antes de hacer ejercicio, estirar después y respetar los tiempos de recuperación para que el músculo no sufra.
- Las malas posturas: adoptar posturas inadecuadas al trabajar, estudiar, dormir o realizar otras actividades puede provocar que los músculos se tensen y se dañen. Es importante mantener una buena higiene postural y cambiar de posición cada cierto tiempo.
- Las lesiones: las lesiones musculares como los esguinces, las distensiones o las roturas pueden provocar contracturas como mecanismo de defensa del cuerpo. En estos casos es importante consultar con el médico y seguir sus indicaciones.
¿Cómo aliviar las contracturas musculares?
Si sufres una contractura muscular lo primero que debes hacer es identificar la causa y evitarla en lo posible. Por ejemplo, si la contractura se debe al estrés debes intentar relajarte y reducir los factores que te generan ansiedad. Si la causa es un exceso de ejercicio debes moderar la intensidad y corregir la técnica.
Además de intentar evitar la causa que la provoca, existen otras medidas que puedes tomar para aliviar el dolor y favorecer que tus músculos se recuperen. Aquí tienes algunas de ellas que pueden ayudarte:
- Aplicar frío o calor: el frío ayuda a reducir la inflamación y el dolor y el calor ayuda a relajar el músculo y a mejorar la circulación sanguínea.
- Masajear el músculo: el masaje ayuda a descontracturar el músculo y a eliminar las toxinas que se acumulan en él.
- Estirar el músculo: los estiramientos ayudan a alargar el músculo y a recuperar su elasticidad. Es importante estirar antes y después de hacer ejercicio y también durante el día si pasas mucho tiempo sentado o en una misma postura.
- Solicitar muestras gratis de productos de farmacia: una forma de aliviar las contracturas musculares es probar productos de farmacia que te ayuden a relajar los músculos y a recuperarte mejor. En nuestra web puedes solicitar muestras gratis a domicilio sin ningún coste. Así podrás probar diferentes productos y elegir el que más te convenga.
Uno de los productos que puedes solicitar para poder comprobar sus beneficios por ti mismo es el Gel Fisiocrem, un gel natural que contiene extractos de plantas con propiedades antiinflamatorias, analgésicas y cicatrizantes. El Gel Fisiocrem te ayudará a aliviar el dolor muscular, a reducir la inflamación y a regenerar los tejidos dañados haciendo desaparecer poco a poco la contractura. Además, tiene un efecto refrescante y calmante que te hará sentir mucho mejor.
¿Cómo prevenir las contracturas musculares?
La mejor forma de evitar las contracturas musculares es cuidar tu salud muscular y evitar los factores que las provocan. Aquí te dejamos algunas medidas preventivas que puedes tomar para prevenir las molestas contracturas:
- Haz ejercicio físico regularmente: el ejercicio físico te ayudará a fortalecer los músculos, a mejorar la flexibilidad y a liberar tensiones.
- Mantén una buena higiene postural: debes adoptar posturas correctas al trabajar, estudiar, dormir o realizar otras actividades. Evita encorvarte, cruzar las piernas o apoyar la cabeza en una mano.
- Controla el estrés: debes intentar reducir los niveles de estrés y ansiedad que afectan a tu salud física y mental.
- Hidrátate bien: debes beber suficiente agua para evitar la deshidratación, que puede afectar a la salud muscular.
- Cuida tu alimentación: lleva una dieta equilibrada y variada, que incluya alimentos ricos en proteínas, vitaminas, minerales y antioxidantes, que te ayudarán a nutrir y proteger tus músculos. Una forma de complementar tu alimentación y mejorar tu rendimiento físico es consumir barritas energéticas que te aportarán energía, proteínas, fibra y otros nutrientes que te ayudan a mantener tu vitalidad y a recuperarte mejor del ejercicio. Además, son fáciles de llevar y de consumir en cualquier momento y lugar.
Esperamos que estos consejos te hayan sido útiles para aliviar las contracturas musculares y prevenir su aparición. Recuerda que la mejor forma de evitar las contracturas es cuidar tu salud muscular.