La dermatitis atópica es una de las enfermedades dermatológicas infantiles más importantes de España. Para mejorar sus síntomas debe tratarse correctamente con cremas y geles de ducha para pieles atópicas. Como ya sabréis, esta enfermedad produce sequedad, picores, eccemas e incluso psoriasis. Suele aparecer en la infancia, entre los 3 meses y los 5 años de vida, y desaparecer en la adolescencia. Aunque también puede aparecer en menor medida en la edad adulta. La gente la que sufre se ve obligada a seguir unas rutinas diarias con todos los cuidados necesarios para que su enfermedad no vaya a más.

Los casos de dermatitis atópica se han multiplicado en los países occidentales a lo largo de las últimas décadas, ya que aunque normalmente la enfermedad aparece por herencia genética, también hay otros factores como las agresiones externas (contaminación, etc.) o el uso excesivo de jabón que acaban por debilitar la barrera protectora de la piel.

Elegir geles de ducha para pieles atópicas o sensibles.

Cuando se sufre dermatitis atópica la piel sufre sequedad extrema y deja de cumplir su función de barrera contra las agresiones externas y los alérgenos como el polvo, los pelos de animales, el polen, etc. Por lo que se hace necesario actuar lo más rápidamente posible para mitigar los síntomas e intentar disminuir la frecuencia con la que se producen los brotes en este tipo de pieles.

Como decíamos anteriormente, las pieles atópicas, tanto adultas como infantiles, necesitan un cuidado especial, y es que como con cualquier otra enfermedad crónica, la vida del que la padece puede verse afectada. Por ello es necesario seguir una rutina diaria para hidratarla, nutrirla y suavizarla. El primer paso es elegir un buen gel de ducha para pieles sensibles o atópicas.

En primer lugar, deberíamos de elegir un gel para la ducha sin jabón que respete la capa hidrolipídica que recubre la piel y que actúe como un protector natural. Además, al no contener jabón, no corremos el riesgo de irritar los ojos de los peques durante el baño.

En segundo lugar, hay que fijarse en cuáles son los ingredientes principales de los  geles de ducha para pieles atópicas, ya que deben de ser ingredientes que aporten lípidos que protejan la capa protectora de la piel y la mantengan suave, como los ácidos grasos Omega 6, el aceite de almendras dulces, el de aguacate, la avena… Existen muchos geles de ducha con estas características, como por ejemplo éste de la marca Welleda, que nos gustan especialmente porque además en su composición utilizan ingredientes naturales y bio.

La mayoría de los geles de este tipo los encontraréis en farmacias, y si queréis probarlos antes, podéis solicitar muestras gratuitas a través de internet en webs como Muestras a Casa.

geles de ducha para pieles atópicas

Geles de ducha para pieles atópicas: Consejo de uso

También es preferible que apliquemos el gel mediante ligeros masajes con la palma de la mano. Las esponjas suaves también se pueden utilizar, pero usando nuestras propias manos minimizaremos las irritaciones. De la misma manera, el agua debe de estar templada evitando que supere los 35º. Por último, la mejor forma de secarnos al salir de la ducha es hacerlo con toallas mullidas de algodón y con ligeros golpecitos, sin frotar la toalla en la piel ni apretar demasiado. Además, conviene que no la sequemos completamente para aplicar a continuación una crema emoliente.

Dicha crema nos ayudará a mantener y aumentar la hidratación que se ha conseguido durante el baño. Deberemos elegir una crema emoliente, es decir, una crema que además de hidratar la piel, nos ayude a calmarla para evitar sequedad y picores gracias, entre otras cosas, a sus efectos antiinflamatorios, y que además nos ayude a restaurar la barrera protectora de la piel.
Por último, no olvidéis que si utilizamos prendas de algodón, tendremos menos posibilidades de padecer irritaciones que las que nos podrían provocar prendas como la lana o el poliester.

Siguiendo estas indicaciones, conseguiremos mantener la piel atópica a raya y en las mejores condiciones con el fin de evitar en la medida de lo posible la aparición de las molestias que provoca esta enfermedad, a la vez que notaremos nuestra piel más hidratada, suave y flexible en nuestro día a día.

geles de ducha para pieles atópicas